El cerebro es uno de los órganos que más energía consume. Por sí solo utiliza el 21% de la energía total necesaria para el funcionamiento del organismo , aunque solo representa del 2 al 3% del peso corporal.
Es decir, en cada comida, el 21% de las calorías de nuestro plato se dedican al cerebro. Es por ello que, durante un examen podríamos tener a mano un pequeño snack dulce para dotar rápidamente de energía a nuestro cerebro y así mantenernos al máximo de su capacidad intelectual.
Otros órganos que consumen mucha energía son los músculos y el hígado.

Los 5 órganos que más energía consumen
1️⃣ El cerebro (21%)
2️⃣ El hígado (21%)
3️⃣ Los músculos (19%)
4️⃣ El corazón (8%)
5️⃣ Los riñones (8%)
Nuestro cerebro obtiene su energía de la glucosa. Este azúcar simple lo aporta nuestra dieta y luego lo transporta la sangre hasta las células cerebrales, donde se convierte en energía pura, llamada ATP, utilizable por todas nuestras neuronas.
¿Sabías que…?
El azúcar no utilizado se almacena en los músculos y el hígado para su uso posterior. Pero en caso de un exceso importante, al ser limitado el almacenamiento en el hígado y músculos, la glucosa se transforma en lípidos y se almacena en las células grasas.